martes, 21 de diciembre de 2010

De caminos y trampas



Vivo en constante añorar el mar.

Me dibujo ventanas en la piel para asomarme a su recuerdo.

Y es que Ítaca no era la meta, sino la trampa.


7 comentarios:

Blue dijo...

En eso tengo suerte. No tengo más que girar la cabeza...y ya está!!!

Bicos**

¿Es la playa de las catedrales?

mariajesusparadela dijo...

La trampa en la que todos queremos revivir.

Alamut dijo...

Blue: tienes suerte, sí. A mí me gusta estar sobre él y no solo mirarlo. ¡Premio! Es la playa de las Catedrales, un gris día de primavera, con la marea baja ....

Mª Jesús: a veces no, sólo luchas por salir de ella....

Besos

J. dijo...

En un rato bajo, te meto una ración de brisa en un táper y te lo mando para reyes ;)

Miguel dijo...

La mayoría de las veces sabemos que es una trampa, pero no podemos evitar pensar que es lugar dónde queremos estar...
Por cierto, bonita foto...

LU dijo...

Preciosa foto, que sin trampa ni cartón trae ese aroma y brisa marina.

Biquiños

Rochies dijo...

CUANTOS ITACA NOS ATRAPAN...